Hoy te voy a poner unos ejemplos de fotografía nocturna donde hay una gran diferencia, la fase lunar.
Cuando no tenemos luna todo está oscuro, por lo que si queremos fotografiar algún elemento terrestre visible deberemos iluminarlo. Otra opción será fotografiar su silueta. En este caso, el lugar estaba a oscuras y aproveché su silueta para destacarla delante de la Vía Láctea, que es la única luz del cielo. Se ve lo potente que se ve, gracias precisamente a la ausencia de contaminación lumínica.
Por el contrario, hay días donde la luz de la luna nos viene bien, tanto para iluminar el sujeto como el paisaje. La luna acababa de salir y no molestaba mucho en el cielo. A cambio, me iluminó el castillo, cosa que yo no podría haber hecho. También el primer plano está iluminado, evitando que se quede oscuro y por lo tanto, con ruido.
A la hora de planificar ten en cuenta todos los factores y elige la fase lunar y las condiciones que mejor te vayan para conseguir la fotografía que habías soñado. Si quieres aprender más sobre fotografía nocturna consulta mis talleres de fotografía nocturna.