Las Fallas no serían nada sin la gente que viene a disfrutar de la fiesta, pero hay quien las vive de manera especial, con sentimiento, estas personas son las Falleras y los Falleros.
Uno de los momentos más especiales es la Ofrenda a la Virgen de los Desamparados. Cada Falla recorre las calles de Valencia con un único destino, la plaza de la Virgen, a la cual le llevan su ofrenda en forma de ramos de flores. Estos ramos formarán el manto que cubre a la Virgen cuyo dibujo se hace de rogar hasta el paso de la última Falla.
A nivel fotográfico, si lo tuyo es fotografiar gente, la Ofrenda es tu momento. Durante la Ofrenda podrás captar innumerables momentos significativos. Si hablamos de la gente que participa en la ofrenda podemos destacar el papel que juegan las Falleras. La mayoría siente una gran emoción y es muy fácil captar un momento único. También hay muchas bandas de música, que viven la fiesta y la animan, de una manera especial.
Uno de los momentos mágicos es cuando entran a la plaza de la Virgen. Es un momento lleno de emoción, en donde más de una y más de uno sueltan una lagrimilla.
Lágrimas y emoción es lo que más abunda en dicha plaza durante el 17 y 18 de marzo de cada año en Valencia. Falleras y Falleros recorren las calles hasta que llega la última Fallera, la Fallera Mayor, acompañada de la Fallera Mayor infantil, para cerrar un ciclo que ha durado un año.
La Nit del Foc es el mejor desenlace para la noche del 18 de marzo, cubriendo el cielo nocturno de Valencia con multitud de colores y un ruido ensordecedor recordando a las mascletás que se disparan a las 14:00.
Y para finalizar las fiestas de las Fallas, la Nit de la Cremà. Todos los monumentos deben ser pasto de las llamas, pero para ello, antes cada una de las Falleras Mayores deben dar su beneplácito para disgusto pasajero de ellas mismas. Las lágrimas vuelven a ser protagonistas de estos momentos, que no logran apaciguar el fuego que devora todo el trabajo realizado por los artistas falleros del último año.
